Descripción
El cacao en su estado crudo posee cerca de 300 componentes identificados de los cuales la gran mayoría, de una forma u otra, benefician nuestro organismo.
Los flavonoides son los antioxidantes presentes en el cacao, los cuales estimulan la producción de óxido nítrico, molécula que promueve la vasodilatación o aumento del calibre de los vasos sanguíneos.
Esto hace que se incremente el flujo de sangre y que la presión arterial se mantenga estable.
Además, según un estudio hecho con 90 ancianos que padecían deterioro cognitivo leve , estos flavonoides mejoran el sistema que activa el pensamiento.
Al tomar flavonoides derivados del cacao por ocho semanas, estos ancianos mejoraron en pruebas de función cognitiva y fluidez verbal.
El consumo de cacao está asociado a una menor incidencia de infartos.
Los flavonoides polifenólicos que se encuentran en este fruto tienen el potencial de prevenir las enfermedades cardíacas.
Los científicos de la Harvard Medical School demostraron que el consumo de cacao, disminuye los niveles de lipoproteínas de baja densidad (LDL) o colesterol“malo” y aumenta el colesterol “bueno”.
Los efectos antioxidantes del cacao pueden influir directamente de manera positiva sobre la resistencia a la insulina o discapacidad del cuerpo para responder a la insulina, ayudando a reducir el riesgo de padecer diabetes.
Además el cacao:
- Reduce el riesgo de enfermedades arteriales.
- Mejora la depresión, el estrés y el estado de ánimo.
- Reduce los sintomas pre-menstruales.
- Relaja el sistema nervioso, favorece el sueño y la relajación muscular.
- Mejora el flujo de sangre.
- Vigoriza el corazón.
- Combate los problemas cutáneos.
- Eficaz anti-envejecimiento.
- Mejora la digestión.
- Previene el estreñimiento
Modo de uso:
Puede utilizarse para espolvorearlo en tus desayunos o postres, así como para añadir a tus batidos o zumos.
De 5 a 10 gramos por persona (de una a dos cucharaditas de postre)
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